“Quiero ser un Rey que no renuncie a la tradición, que siga la línea de comportamiento de sus antecesores, que represente la continuidad de esta nación e igualmente su estabilidad. Pero al mismo tiempo, un Rey del siglo XXI que una a la sociedad, la represente y la impulse”,de este modo ha contestado a la pregunta de cómo afrontará su reinado, tras su investidura del próximo 30 de abril como Soberano de los Países Bajos en una entrevista emitida ayer por la noche por el canal de televisión público holandés NOS y la cadena privada RTL 4.
El príncipe Guillermo, acompañado de la princesa Máxima, se ha mostrado relajado, sincero e incluso en algunos momentos bromista durante la entrevista, realizada por los prestigiosos periodistas Mariëlle Tweebeeke y Rick Nieman, que ha tenido como temas principales los retos de su reinado, el papel de la monarquía en la sociedad holandesa actual, y los importantes cambios que sufrirán sus vidas, una vez convertidos en Jefes de Estado de los Países Bajos.
"No es relevante que te llamen Princesa o Reina"
La entrevista ha comenzado con el anuncio de la abdicación de la reina Beatriz el 28 de enero de este año. Sobre la importancia que le dan a sus nuevos títulos, los futuros Reyes de los Países Bajos han relativizado: “La gente puede dirigirse a mí de la forma que consideren conveniente, del modo en que se sientan más cómodos. No soy ningún obsesionado del protocolo. Seré Rey, pero también un ser humano”. Por su parte la princesa Máxima tampoco se ha mostrado estricta con los tratamientos: “Todo el mundo me llama Máxima por la calle. Al fin y al cabo no es tan relevante que te llamen Princesa o Reina. Lo importante es el título que representamos”.
El futuro rey Guillermo Alejandro – el príncipe ha subrayado en varias ocasiones que no será Guillermo IV ya que su nombre siempre ha sido Guillermo Alejandro y no quiere ser “un número”– no ha evitado ninguna pregunta, incluso sobre temas de la política holandesa, como su papel de Rey en la formación del Gobierno, o la polémica compra de una casa de verano en Mozambique sobre la que ha afirmado que “pese a que las intenciones eran buenas, cometimos un error. Somos humanos y como tales nos equivocamos. En el futuro es posible que cometa otros errores pero no es algo malo. De los errores se aprende”.
Especialmente emocionante -la princesa Máxima a duras penas pudo contener las lágrimas- fue el momento en el que los entrevistadores preguntaron al Príncipe sobre su hermano el príncipe Friso, que desde hace más de un año se encuentra en estado de coma tras un accidente de esquí. “Es una gran tragedia.
Durante más de un año vivimos esta situación tan terrible, en la que Mabel y mi madre hacen todo lo humanamente posible para estar al lado de mi querido hermano. Todos los días están pendientes de él. Por mi parte no puedo hacer más que darles todo mi apoyo y hacerlo lo mejor posible durante el 30 de abril”. El Príncipe subrayó además que no se ha producido ninguna mejora en el estado de su hermano: “Su situación clínica sigue siendo la misma, pero se encuentra en las mejores manos”.
Sobre los preparativos de la ceremonia del próximo 30 de abril los Príncipes han reconocido que ensayarán antes del gran día. “Especialmente con las tres niñas de modo que sepan qué tienen que hacer en cada momento. No es que sea muy complicado, pero tienen que hacerlo bien”, según la princesa Máxima, que no quiso revelar cómo será el vestido o los accesorios que lucirá durante la ceremonia de investidura.
Por su parte el futuro Rey indicó que irá vestido de civil –en Holanda el Jefe de Estado no puede ostentar cargos militares – y que se cubrirá del tradicional manto de armiño. Sobre la polémica sobre el uso de una prenda de piel de animal, el Heredero se ha mostrado comprensivo con aquellas personas que están en contra del uso de pieles para la confección de piezas de ropa pero apeló a la tradición de más de doscientos años que prescribe que el nuevo Rey vista el manto de armiño.
Ensayos con las niñas
Los Príncipes anunciaron que sus tres hijas estarán presentes en todos los actos del día 30 y que las niñas son totalmente conscientes de la carga histórica e institucional de la jornada. La princesa Amalia se convertirá en Heredera desde ese día, pero los Príncipes se mostraron firmes en su intención de protegerla de la presión mediática hasta que cumpla los 18 años.
“Nuestras hijas son nuestras hijas y las amamos a todas por igual. No hay la más mínima diferencia. La faceta institucional de Amalia comenzará a los dieciocho años, cuando entre en el Consejo de Estado y reciba una dotación del Estado. Hasta ese momento la protegeremos en todo lo posible. Lo que significa que no participará en actividades oficiales, o en su caso lo hará lo menos posible. Su entorno ahora sólo debe ser el de sus padres, sus hermanas y sus amigos”, según el príncipe Guillermo.
La princesa Máxima se mostró confiada en mantener sus responsabilidades laborales.“Mi intención es continuar, especialmente en el caso de mis actividades en el exterior. No sólo porque me apasionen sino también porque creo que son beneficiosas para la imagen de Holanda”, afirmó la Heredera. La Princesa dijo que su faceta profesional es “muy importante” y que le ofrece “satisfacciones con las que afrontar el resto de mis obligaciones con mucha más energía positiva, incluso mi papel como madre”.
El Príncipe ha resaltado las características que quiere que definan su reinado: “Quiero ser un Rey que esté presente allá donde se me necesite, ayudando a los que lo requieran; representar de forme óptima a mi país en el extranjero; ser un elemento de unión de la sociedad. En definitiva, estar al servicio de nuestra sociedad.” Sobre cómo quiere que se le recuerde cuando su mandato termine, el Heredero, que ha recibido el consejo de su madre, la Reina, de ser “auténtico”, ha afirmado que su máximo deseo es dejar un mejor país a la siguiente generación.
No es la primera entrevista en profundidad que los Herederos ofrecen a lo largo de sus vidas. El príncipe Guillermo protagonizó su primer encuentro con la prensa de estas características en 1993, poco después de haber finalizado sus estudios en la Universidad de Leiden. En aquella intervención el ya casi inminente Rey abordó temas como el rol que debe desempeñar un Rey en el mundo actual y su intención de protagonizar un reinado con capacidad de decisión y no sólo puramente formal.
“No me parece idóneo que el Rey se convierta en una figura decorativa”, según sus palabras. Con ocasión de su 30º cumpleaños en 1997, el Heredero dio igualmente una entrevista en la que anunció que había decidido especializarse profesionalmente en la gestión del agua, por recomendación de su padre.
En 2002 se produjo la primera entrevista del Príncipe con su por aquel entonces prometida, Máxima Zorreguieta, poco antes de su enlace matrimonial. En aquella ocasión los Príncipes hablaron sobre su encuentro en Sevilla, la pedida de mano o la reacción de sus padres al hacerles partícipes de su relación. Además la actual princesa Máxima se refirió a la actuación de su padre, Jorge Zorreguieta, durante la dictadura argentina. Cuando el príncipe Guillermo cumplió cuarenta años, en 2007, la televisión pública holandesa emitió un reportaje especial sobre su vida.
En la entrevista que acompañó al documental, el Heredero dijo sentirse completamente preparado para asumir las funciones de rey. “A los dieciocho años estaba técnicamente listo, ahora siento además que he madurado como persona”, afirmó Guillermo de Holanda. Ya ha llegado la hora.
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